Oídos sordos, palabras necias
Tal parece que el escándalo Padierna-Bejarano sigue dando que hablar dentro de Morena, pese a que a Alejandro Díaz Durán ya anunció su postulación por la Cuauhtémoc, que al igual Dolores Padierna alzó la mano para competir por esa alcaldía y el discípulo de Ricardo Monreal, el actual alcalde, Néstor Núñez, quiere seguir gobernando, ya que según él, sus habitantes quiere que siga en el cargo por sus loables acciones.
Aunque, todas las parejas románticas en el mundo de la política deben tener un factor en común, ya sean las ganas de lograr un cambio en el país o aportar valor a la ciudadanía. En el caso de René Bejarano y de Dolores Padierna, la ambición y la corrupción los ha caracterizado durante varios años.
Después de décadas de robarle al pueblo y enriquecerse a costillas de la gente mexicana, este matrimonio de ladrones ha decidido regresar por la alcaldía Cuauhtémoc. Son descarados.
Hablemos un poco del pasado del señor René Bejarano, o también conocido como «el señor de las ligas, este corrupto recibió este apodo cuando, en 2004, fue expuesto recibiendo 45.000 dólares en efectivo por parte de un empresario, dicho dinero estaba destinado a financiar campañas del PRD a cambio de futuros contratos.
Después de esto, Bejarano estuvo en la cárcel; sabiendo esto, ¿estarían de acuerdo con que un corrupto así tenga un cargo tan importante como lo es una diputación federal?
Por otro lado, tenemos a su esposa, la señora Dolores Padierna, quien ha decidido registrarse como aspirante de Morena por la alcaldía de Cuauhtémoc., pero a pesar de que Padierna dice que busca recuperar la esperanza en la alcaldía, es difícil creerle cuando ha tenido una carrera que ha brillado por su nepotismo, influyentismo y corporativismo.
Es una pena que Dolores Padierna quiera seguir saqueando a la alcaldía, pero es evidente que su ambición no conoce límites y hará todo lo que esté en sus manos para darle cargos a la gente incompetente que esté de su lado.
Actualmente, infiltrados que se hacen pasar por militantes morenistas, quieren regalarle a Padierna la alcaldía Cuauhtémoc y a Bejarano una diputación federal.
Aunque militantes de ese partido señalan que es inconcebible que estos dos personajes quieran aprovecharse de los ideales de Morena para conseguir un cargo que les traerá beneficio económico a ellos y a sus allegados.
Si algo nos ha dejado claro la historia es que, tanto a como a Dolores Padierna, no les interesa el futuro de México; solamente buscan enriquecerse y tener una vida llena de lujos.
Por lo que muchos morenistas recomiendan que tengan mucho cuidado con estos chapulines que quieren apoderarse de ese partido, estas personas son oportunistas que, detrás de una máscara de austeridad y honestidad, planean robarse los recursos del pueblo de México e igualmente la Cuauhtémoc podría estar en grave peligro si caen en manos de ese matrimonio más corrupto y sin escrúpulos que nuestro país haya visto, pero muchos no les hacen caso, por lo que es más seguro que se postulen y con la compra de votos hasta ganen.