El innombrable
Luego que en esta columna hemos hablado de René Bejarano y de cómo autoridades federales lo involucraron con la mafia rumana y por increíble que parezca, Claudia Sheinbaum dejó a un lado los problemas de la CDMX y así unos días se dedicó a defender a René Bejarano de los señalamientos que lo vinculan de la organización criminal extranjera dedicada a la trata de blancas en Cancún.
Aunque algunas áreas de inteligencia del gobierno de la 4T presentaron, en octubre pasado ante el Gabinete de Seguridad, que encabeza el Presidente, un informe que presuntamente vincula al esposo de Dolores Padierna y otros políticos con el crimen organizado internacional.
La jefa de Gobierno puso en duda el sustento de la información, a pesar de que el diario afirma que se dio en una reunión del gabinete federal de seguridad, donde se señaló a Bejarano de estar vinculado, a través de colaboradores con el capo Florian Tudor, El Tiburón.
Los señalamientos aparecen justo cuando Sheinbaum es acusada por las propias bases de Morena de haber pactado con el señor de las ligas la entrega de la alcaldía Cuauhtémoc para su esposa, Padierna, sin tomar en cuenta a la militancia ni esperar las encuestas internas.
Luego del doloroso episodio de los video escándalos, que incluso lo llevaron a la cárcel en 2004, es muy poco probable que Bejarano se metiera a algo tan ruin como la trata de personas y otras cosas que le achacan a El Tiburón, pues lleva muchos años tratando de limpiar su imagen.
Pero eso no implica que personajes cercanos a él lo pudieran estar haciendo a su nombre, y por eso habría sido mencionado en el citado informe, aunque el ex perredista se deslinda ayer mismo del caso y aseguró que fuentes de Palacio Nacional le dijeron que no tenía de qué preocuparse.
Independientemente de que sean ciertos o no los señalamientos en su contra, llama la atención que la nota se haya publicado justo cuando se negocian las candidaturas y que incluso algunas ediciones regionales de La Jornada Diario afín a la 4T, la hayan retomado.
Está claro que fue una filtración desde el propio gobierno, con la intención de dañar la imagen de Sheinbaum o de hacerle llegar un mensajito para que se abstenga de hacer acuerdos con este tipo de personajes.
Evidentemente, se trató de fuego amigo y la cándida Claudia cayó en el garlito al defender públicamente a Bejarano en un tema que ni ella sabe si es verdad o no. Lo único que logró con su inocente reacción fue confirmar que trae un acuerdo extra cancha con el de las ligas.
Quien haya lanzado la piedra no es que traiga algo contra el viejo profesor. No, él llegue es para la jefa de Gobierno y eso es precisamente lo que llama la atención, pues la filtración viene del Palacio Nacional.
Por otra parte, esta jugada complica la definición de las candidaturas de Morena en las 16 alcaldías de la ciudad, pues si se cae el acuerdo para que llegue Padierna, Claudia tendría que pensar en un plan b para la Cuauhtémoc o, peor aún, recomponer su lista en varias alcaldías.
En una de ésas, a la funcionaria se le caen los acuerdos que ha hecho en lo oscurito con siniestros personajes, y el cuadro se le descompone.
Por lo pronto, decidió sacarse las uñas en defensa de Bejarano.